Cultivar tu propio huerto urbano puede resultar una tarea desafiante pero sumamente gratificante. No sólo te permitirá disfrutar de alimentos frescos y saludables cultivados por ti mismo, sino que también es una excelente actividad para relajarte y conectar con la naturaleza, a la vez que contribuyes al medio ambiente.
En este artículo te contamos cómo cultivar un huerto urbano y qué consideraciones debes tener en cuenta para hacerlo de manera efectiva.
Hacer un planeamiento previo
Antes de empezar a cultivar, es importante que determines el espacio que tienes disponible y qué tipo de plantas puedes cultivar en él. Si vives en un apartamento o casa sin jardín, puedes optar por cultivar plantas en macetas o recipientes, como tomates cherry, lechugas, pimientos y hierbas.
Si tienes un espacio al aire libre con tierra, es importante que sepas lo que encajaría mejor en tu entorno. Evalúa las condiciones de tu terreno como la cantidad de luz que recibe, la humedad o el clima. Si vives en un clima cálido, la planta perfecta para ti puede ser el cilantro, los pimientos, o incluso el tomate.
Una vez que tengas una idea sobre cuál puede ser tu espacio ideal, es hora de elaborar un plan de siembra. Deberás plantear dónde colocar cada planta, cómo las ubicarás y cuándo será su temporada ideal de crecimiento.
Selecciona las semillas que vas a cultivar
Una vez que tienes tu espacio y plan de siembra, es hora de elegir las semillas que vas a cultivar. Aquí tienes muchas opciones, desde plantas ornamentales hasta verduras y hortalizas.
En cada envase de semillas se indica cuánto espacio necesita la planta y cuánta luz necesita para crecer. También debes considerar la altura que alcanzan y si necesitan aunque sea un solo tipo de tierra especial.
Si eres principiante, te recomendamos plantas fáciles de cultivar, como la menta, la albahaca y la lechuga.
Prepárate para cultivar
Una vez que tienes tus materiales de siembra en orden, es hora de preparar el terreno.
Si tienes tierra, asegúrate de quitar cualquier objeto que pueda interferir con tu siembra, como piedras, ramitas, o maleza que pueda ahogar tus plantas.
Si estás plantando en macetas o recipientes, primero debes asegurarte de que tengan el tamaño adecuado para que las raíces crezcan sin problemas. También debes escoger una tierra concreta para la planta que vas a cultivar; cada una tiene una textura diferente y requiere nutrientes distintos.
Mantén tus plantas saludables
Una vez que hayas plantado tus semillas y las hayas cuidado durante varias semanas, es hora de mantener tus plantas saludables.
Existen algunos trucos prácticos que pueden ayudarte a mantener una huerta urbana perfectamente saludable como irrigarlas de manera regular, asegurarte de que las macetas tienen drenajes y limpiarlas cuando sea necesario.
Cultivar un huerto urbano es una tarea sumamente gratificante. No sólo tienes la posibilidad de disfrutar de alimentos frescos y saludables, sino que también contribuyes al medio ambiente cultivando tus propias plantas. Siguiendo estas prácticas puedes conseguir una huerta urbana estable y sana, de la cual podrás gozar durante mucho tiempo.
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