Los vehículos híbridos son aquellos que tienen un motor térmico, que realiza una combustión interna, que usa gasolina, y un motor eléctrico, que es implementado para dar fuerza y favorecer el movimiento mediante la tracción eléctrica. Un tipo de automóvil que ayuda al medioambiente y que posee otros beneficios.
Hace unas tres décadas muchas compañías se centraban en este segmento del auto, en ciertas geografías se aprobaron diferentes leyes anticontaminaciones con el propósito principal de minimizar el impacto, tanto en el medio ambiente como para la salud de cada persona, ya que los combustibles fósiles que so usado en los motores diésel y los de gasolina generan mucho residuo contaminante.
En 1988 llego la Normativa EURO, debido a la alta contaminación ambiental, donde se exige minimizar las emisiones de gases al ambiente, por ejemplo, con la utilización de catalizadores, el incremento de la cantidad de marchas, especialmente en las cajas de cambio o mediante la eliminación del plomo por la gasolina. De esta maneta los motores de este tipo trabajan menos, minimizan su consumo y, con ello, la contaminación.
La industria automotriz inició una profunda innovación, volcándose en la exploración de nuevos automóviles que fueran cada vez más sostenibles y corteses con el medio ambiente. Mientras que, por un lado, inició un lento renacer de los automóviles eléctricos, que, actualmente, ya se venden a través de multitud de marcas y modelos, los cuales llevan un desarrollo en tendencia hacia la hibridación de los coches, y que se plasmó en el origen del Toyota Prius, el primer diseño híbrido creado en el mundo.
Elementos importantes de un automóvil híbrido
Los automóviles híbridos son combinados con un motor térmico (donde genera una combustión interna que usa gasolina, suministrando propulsión al vehículo y recargando la batería cuando el automóvil funcionando a una velocidad de crucero) con un motor eléctrico (que tiene como función suministrar fuerza para beneficiar el movimiento mediante la tracción eléctrica. Es el motor principal, es ideal para largos recorridos a velocidades bajas).
Asimismo, cuenta con baterías o módulos habitualmente de ion litio que rematan la contribución de energía y favorece su almacenamiento. Las baterías sustentan al motor de energía eléctrica, de modo que se facilite poder acelerar desde una parada. Igualmente, son los comprometidos de dar potencia suficiente para impulsar el motor debido a que se aprovecha de la energía máxima que se genera durante el manejo, nunca desperdiciando, energía ni consumiendo mucho combustible.
El divisor de potencia es el tren de embragues que mezcla la energía que generan los motores de combustión y eléctrico. Su función es clave gracias a que es el culpable del manejo suave y sin tener saltos.
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