Las Abejas nos superan cada mañana cuando inician su vuelo y van en busca del más rico néctar. Siempre manteniendo el servicio de sus colmenas, residen en un modelo estructurado a partir de una organización jerárquica cuyo propósito es único y excelente: su producción mielera. Para estos insectos no es castigo trabajar para la reina, sino un típico estilo de vida. Solo es necesario fijarse en su forma de actuar, directa y libre, siendo cada día tan conscientes del valor de trabajar juntos. Posiblemente, así podamos corregir las cosas.
Es una obra de autoayuda que nos provee alas. Textualmente. En algo que, sin apreciarlo, llevamos dentro y está inscrito en nuestro instintivo como un mantra quedado tatuado en el alma que nos dice cada día: en la unión hace la fuerza. El inconveniente es que debemos olvidarlo. Preferimos excluir todo aquello que, supuestamente, menos interesa. Sin embargo, ellas sigan ahí. Cada día. Chasqueando. Expulsando su característico SOS. Ofreciendo un respiro. Por culpa del abuso de pesticidas inapropiados en el mundo, como el fipronil. Desatendidas por culpa de un medio ambiente que jamás entendió del todo su matriarcado.
Ideología de las abejas
Su título principal es La ideología de las abejas. El Subtítulo es: Aprender a extraer el néctar de la vida. Escritora: Alison Davies. Editorial: Libros Cúpula. A lo largo de su lectura nos incita a dejarnos mandar por sus zumbidos. A elevarse hasta lo más alto, viajando de flor en flor, sacándole el mejor provecho a la existencia mientras nos favorecemos de algo tan sencillo como es el trabajo en equipo.
La filosofía de las abejas
Psicólogos dice que flotan como una mariposa, chupa como una abeja, evita que las manos no logran golpear lo que sus ojos no puedan ver, Ya nos lo señaló Muhammad con esta expresión ídolo convertida en lema que cuenta su manera de boxear: ligero y rápido de piernas, moviéndose como si emergiera, mientras arrojaba una reprimenda, pero cuya acumulación fracasaba y vencía a sus rivales. Por eso no está nada mal. Existir como boxeaba. Empleando la genial ideología de las abejas.
¿Pero qué sucedería si desaparecieran? ¿Si se evaporasen y terminasen por extinguirse? ¿Cómo nos aquejaría su pérdida? El mismo Albert Einstein indico que al parecer, ya que a él se imputa el dictamen de que sin ellas todo sería una catástrofe y nos quedarían solo 4 años de vida. Sin las abejas no existiría la polinización, las hierba, animales, y ni el hombre, indican que dijo Albert Einstein.
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