El Centro Cívico recibió dos reconocimientos por el poder energético, el uso de materiales y el consumo solidario de agua.
Con alrededor de 10.000 metros cuadrados de reconstrucción y su estilo bioclimático, el Centro Cívico, que es parte de la Universidad de los Andes, tomo la certificación LEED en condición Oro de la versión cuatro del Sistema de Certificación de Edificios Sostenibles.
“Este lugar tiene una responsabilidad con la sostenibilidad ambiental y la composición urbana. Ha sido una decisión para producir bienestar en la actualidad, sin desatender a la generación futura”, opinó la rectora de la Universidad de los Andes, Raquel Bernal, durante el evento en julio de 2022 en el cual se dio a conocer el sello LEED.
Responsabilidad con la sostenibilidad ambiental
El Centro Cívico tiene un sistema de cubiertas que inmoviliza el agua lluvia por algunos días y los procesan para el uso de los sanitarios, está sobrellevado por aisladores sísmicos y procedimientos que pueden ahorrar energía eléctrica. Sus materiales de arquitectura fueron destinados para controlar la huella de carbono y conseguir un balance térmico, declaró Maurix Suárez Rodríguez, administrador del campus de Uniandes.
El edificio igualmente recibió una premiación por su Proyecto Sostenible de Construverde 2022, tras el nombramiento del Consejo Colombiano de Construcción Sostenible. La Dirigente recalcó que este espacio se encuentra abierto para las ciudades del país. Es la primera construcción del lugar de la Candelaria con este tipo de premios.
Nuestra responsabilidad con el planeta
Durante la entrega del título, el CEO de World Green Building Council, Cristina Gamboa, dijo que el campus de Uniandes se encuentra a la altura de los patrones internacionales y es un cumplido a la inversión social. El desafío que viene es seguir ofreciendo buenas prácticas que eliminen totalmente el uso de combustibles fósiles por la visión y el liderazgo.
Desde la ciudad de Santiago de Chile, el arquitecto del Centro Cívico Universitario, Cristián Undurraga, dio a conocer que se trató de un programa grupal donde todos tenían la misma ideología. Expresó que el uso de flora nativa, sin duda, perjudicara la calidad de vida del sector y que este tipo de progreso permitirá seguir instando en la causa medioambiental.
La dirigente Raquel Bernal incitó en que, este edificio sea una responsabilidad con el planeta, donde la sostenibilidad ambiental y la remisión del cambio climático solo se van a conseguir con el cambio de nuestras propias conductas.