Luis Planas, ministro de Agricultura, apuesta por estudiar las fuentes alternas de agua y la innovación como instrumentos que permitan conservar el cultivo sostenible sin tener que reducir las producciones agrícolas.
Los científicos señalan que la sequía en parte del Mediterráneo lograría desmejorar con el cambio climático, aquejando a cultivos como la vida humana.
El ministro de Agricultura, ha distinguido la modernización de regadíos frente al uso de otras fuentes de aguas no convencionales como restablecidas o corridas como alternativas para conservar este modelo de producción, ante la eventualidad de que en los siguientes años haya una menor destitución de recursos hídricos, por lo que no debe sobrellevar una disminución de cultivos.
La solución no es abandonar la producción, ha asegurado el ministro a inquietudes durante un acto memorable en Almería, donde ha sobresalido la firma del acuerdo del proyecto adicional a la modernización de regadíos frente a la Comunidad de Usuarios de la Sierra de Gádor, con un presupuesto de inversión de alrededor de 30 millones de euros.
Proyecto suplementario
El ministro de Agricultura, ha pronunciado que el impulso de una plantación sostenible y eficaz es una antelación para el Gobierno español. Según ha consolidado, el regadío es actividad financiera, es agronomía moderna y hasta tecnificada, y es una objeto clave para atenuar el cambio generacional, tan preciso para el sector agrario. Igualmente, permite conservar vivos los pueblos en el territorio e incrementar los eventos de emprendimiento y reproducción de riqueza.
Luis Planas dirigió, en Almería, la firma del acuerdo del proyecto suplementario a la innovación de regadíos de la Comunidad de Sierra de Gádor, frente al Plan de Recuperación, y Transformación, suscrito entre el director de la Sociedad Mercantil Estatal de Estructuras Agrarias Francisco Rodríguez Mulero, y Andrés Cuadrado, el director de la comunidad de usuarios.
El plan cuenta con una inversión neta de 30 millones de euros, donde 15,9 millones están destinados a formalizar el convenio firmado y los 14,1 millones que quedan están destinados al proyecto de Presupuestos Generales del Estado 2023 y se llevara a cabo en el primer trimestre del 2023. Para el ministro, es un monto muy relevante que ayudara a irrumpir la necesaria transformación del cultivo almeriense basado en la agronomía moderna, competitiva y sobre todo rentable.
Las obras ayudarán a 4.500 agricultores en los métodos municipales y afectarán a un área de 9.000 hectáreas que se predestinan al cultivo de tomate, pimiento, calabacín, pepino, berenjena, sandía y melón.