Durante el asunto de la lluvia de peces en los lagos de Utah explica la imaginación y el rozamiento que en la mayoría de los casos necesita devolver especies a su ecosistema natural, una práctica de reconstrucción de la biodiversidad que en E.E.U.U. se ha convertido en un tipo de arte.
A comienzo de julio, el Distrito de Recursos Naturales de Utah mostró un vídeo sobre la reintroducción de diferentes especies de peces a lagos montañosos de dicho estado. Dicho así no suena muy conmovedor, haciéndose viral. En él logramos ver a miles de peces de diferentes especies cayendo al vacío desde de un avión, sus cuerpecitos resplandecientes y nerviosos, agitándose de forma frenética junto a un gran chorro de agua.
Esto es un apto que llena de compasión hacia esta especie peces, y los comentarios en las redes no se hicieron esperar, algunos indicaron que a esa altura, los peces solo podían hallar una muerte violenta. Un despanzurramiento contra las áreas prístinas de los lagos del estado.
La realidad es que es una práctica vieja y segura. “El procedimiento aéreo para la reintroducción es más rápido y menos perturbados para el pez”, expresaron los miembros del proyecto. Logrando reintroduciendo diferentes especies de peces en los lagos de las montañas desde 1950.
Durante la explicación, los expertos, el procedimiento consistía en transportar a los peces introducidos en latas de leche, conducidas por caballos, hasta el lago, por los sinuosos atajos del bosque y la montaña, y la mayoría llegaban asfixiados, y hasta muertos. Y asimismo eran muy pocos. Solía ser una técnica muy costosa e insuficiente, efectiva. Para 1956, los naturalistas experimentaron tirándolos desde un avión.
“Es una excelente oportunidad para ubicar a peces en cautiverio, en especial a estos lugares donde es difícil acceder”, “Es un año caluroso, es superlativo para los pescadores poder llegar a estos espacios de gran altitud, hallar algo de privacidad y lograr pescar en estos lagos”.
Un grupo de peces son lanzados a un lago desde un avión
Se considera que el pez llega pronto a su lugar final, vivo, oxigenado, y con muchas supervivencias “extraordinariamente altas”. Basándonos en el 95%. Las especies que se tiran desde los aviones, es un tipo de pez trucha que los residentes llaman splake, con un tamaño de 2,5 y 7,6 centímetros. Son ligeros que caen como hojas de un árbol. Siendo una caída suave y gentil para el pez.