Rusia ha sido sometida a una presión externa por el calentamiento global

Tras la falta de estrategia climática en Rusia parece inexistente el control energético de la nación, esta condiciones podría cambiar si sigue incrementando la presión internacional en relación con la acción climática. Casi todos los importantes socios dentro del comercio exterior de ruso han declarado su propósito de llegar ser carbono neutral para el año 2050 (o diez años más en el caso de China). Aunque la Unión Europea, tienen pronosticado crear un mecanismo fronterizo de acuerdo de carbono que grave rigurosamente las importaciones de naciones con falta de interés climático como Rusia.

Este cambio conseguiría ser muy nocivo para la economía, debido a que, en relaciones monetarias, la Unión Europea muestra un registro del 45% de las remesas rusas, compuestas especialmente de productos que dejan una gran huella de carbono, entre ellos tenemos el gas, petróleo, metales, carbón y fertilizantes. Según una investigación de los think tanks Sandbag y E3G, los precios que esta tasa presumiría para los productos importados de Rusia conseguirían los 442 millones de euros para el año 2026 y se prevé que unos 1.884 millones de euros para  2035, momento cuando los derechos de emisión de carbono sean casi que gratuitos y baje a cero.

Nuevas estrategias que no contaminan

Poco a poco, más compañías y políticos rusos están comprendiendo los riesgos del cambio climático para no quedarse fuera de la ideología global con relación al desarrollo sostenible. Según la OCDE, considera que el sector privado de Rusia está forzosamente relacionado con la exportación, por lo que no se le ve el interés de introducir actuales tecnologías ecológicas para seguir siendo finalista a nivel internacional. En especial, si se toma en cuenta que el actual modelo fundamentado en materias primas se está pagando con una detención del desarrollo del PIB de Rusia, donde el cambio hacia el progreso sostenible podría prometer nuevas oportunidades para buscar nuevas estrategias de crecimiento sin contaminar.

Se ha deducido que Rusia podría mostrar su objetivo de neutralidad sobre la emoción de carbono para el año 2060 en los diálogos sobre el clima global que se llevaron a cabo en noviembre en la COP26 de la ciudad de Glasgow, en Escocia, lo que creo un regreso a la postura del presidente Vladímir Putin para que se relacione a lo que se está viviendo con el cambio climático.

Las oportunidades se encuentran sobre la mesa, sin embargo, las fuentes renovables de energía mostraron solo el 0,32% del sistema eléctrico ruso en 2020, el país posee uno de los mayores sistemas potenciales para producir energía eólica y solar.

¡Haz clic para puntuar esta entrada!
(Votos: 0 Promedio: 0)