ficus benjamina

Todo acerca del Ficus Benjamina – Características y Cultivo

La ficus benjamina también es conocida por otros nombres en diferentes lugares, como boj o laurel de la India en Costa Rica, amate en México y en algunos países de América del sur es conocida por caucho benjamina o matapalo. Es una higuera nativa del sur y sueresta de Asia y sur y norte de Australia. Es el árbol oficial de Bangkok, Tailandia.

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​ Características generales de la ficus benjamina

En condiciones naturales puede crecer hasta 15 m de altura. Tiene gráciles ramas péndulas y hojas de 6 cm a 13 cm de largo, ovales con punta acuminada. Sus pequeñas frutas son el alimento favoritos de varias especies de aves.

Durante el invierno su desarrollo se reduce a la mínima expresión y en la primavera produce nuevos brotes. Tanto la ficus benjamina como ficus binnendijkii, como ficus robusta, son ficus muy propensas a producir espectaculares durante la primavera que no cesaran hasta bien entrado el otoño.

Las condiciones ideales para que crezca en poco tiempo y de forma saludable son días largos, temperaturas elevadas durante el día y moderadas durante la noche. Sus hojas nuevas son son verdes y más suaves que las viejas que son de un tono más oscuro. También resultan más tiernas que las que endurecidas por el paso de los fríos invernales.

Tareas para el desarrollo y cuidado de la planta, en primavera

ficus benjamina

A continuación, describiremos algunas tareas necesarias para el cuidado de la ficus benjamina que son ideales para realizarse durante la estación de la primavera.

​Trasplante

La primavera es la estación ideal para realizar el trasplante de la ficus benjamina, de esta manera se podrán apreciar perfectamente los nuevos brotes en poco tiempo.

​Poda

El periodo de la estación de verano es el ideal para realizar las podas de mantenimiento, sin embargo, la primavera se presta para realizar podas dirigidas a su formación. De esta manera se puede hacer una guiá para la estructura final deseada. No se debe realizar podas severas, en lugar de eso lo aconsejable es realizar varias podas suaves distribuidas a lo largo del tiempo. De esta forma se dirigirá mejor la estructura de la planta y no se perderá su forma ornamental. Además, la poda permitirá eliminar las partes de la planta que se hayan dañado por los fríos invernales.

​Riego

Debido a que la ficus benjamina transpira más humedad durante la estación de la primavera, los riegos deben tener mayor frecuencia. Si el sustrato se queda muy seco esto puede ralentizar su futuro desarrollo. Hacer que se pongan amarillentas sus hojas e incluso provocar su caída al cabo de pocos días. La ficus benjamina se puede recuperar con cierta facilidad haciendo crecer nuevas hojas, pero durante este periodo de renovación folial pierde su belleza ornamental.

​Abono

Si se utiliza en el trasplante como abonado de fondo, no será necesario aportar más abono en el riego hasta pasado un mínimo de tres semanas. Es valido tanto el uso de abono solido como liquido; es muy importante seguir las instrucciones de la dosis del fabricante.

No siempre se debe hacer el aporte de abono en el agua de riego durante la primavera, dado que en esta estación del año el número de riegos debe ser más frecuente. Es preferible usar dosis bajas de abono en más riesgos que dosis altas en menos.

En cuanto al equilibrio del abono utilizado, es preferible que este sea altamente rico en nitrógeno durante la mayor parte de la primavera, en cambio cuando esta esté finalizando, es mejor cambiar a abonos más equilibrados. Se entiende por abonos ricos en nitrógeno los que poseen mayor cantidad de nitrógeno que fósforo y potasa. También hay que acotar que si los abonos tienen micronutrientes resulta mejor, debido a que los recuersos nutricionales de los sustratos en el contenedor son muy limitados en el tiempo y hay que irlos reemplazando.

​Tratamiento fitosanitarios

Este tratamiento es con el que se evitan las plagas. No toda plaga afecta a los ficus. Entre las plagas comunes que se presentan en verano tenemos a los pulgones, las cochinillas, los trips, y los ácaros, estos últimos suelen presentarse más durante la estación del verano.

Las horas convenientes para aplicar los tratamientos fitosanitarios son las primeras de la mañana y las últimas de la tarde, siempre procurando que sean a las horas de menor calor y mojando toda la planta, incluso sus partes internas.

Para combatir los ácaros es importante prestar atención en mojar perfectamente las partes inferiores de las hojas, debido a que es ahí donde se alojan.

Si el ficus se encuentra en el interior de la casa se recomienda su traslado al balcón o terraza para aplicar el tratamiento fitosanitario.

Si el ficus es anfitrión de psittacanthus coriaceum (llamado coloquial y comunmente “pajarito”), se debe efectuar inmediatamente la poda, debido a que esta planta parasitaria invade todo el árbol, toma para sí mismo nutrientes de él e impide su crecimiento.

​Trips

Esta plaga, cuyo nombre científico es gynaikothrips uzeli, tienen un color café y en su etapa adulta miden entre 2,5 a 3,6 mm, se alimentan en la superficie de las hojas jóvenes que aún están en expansión. Hacen que las hojas se enrollen y desarrollen manchas de color rojo purpura, además de la caída prematura de las hojas. En el interior de las hojas enrolladas este insecto coloca sus huevos y también crecen las formas inmaduras de este. Es una plaga que puede crecer todo el año y causar daños severos a la planta. Muchos insectos son depredadores de esta plaga, además, se puede combatir con insecticidas piretroides como el bifenthrin o tratar el suelo con insecticidas organofosforados como por ejemplo el acefato.

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